Help For Writers

Monday 10 November 2014

DE LA PASIÓN EN LAS CARTAS A LOS EMOTICONOS.

Llegué y te envié un beso.
Dicen que una imagen vale mil palabras. O más. No creo.
Te mando un beso. Solo uno. De esos que están en las muchas imágenes del celular. Me tardé en enviártelo. Se me hacía muy atrevido. Tú me has enviado miles de esos. Bueno, muchos, más de uno.
Pero cuando envío uno, quiero enviar uno largo, intenso, prolongado, cálido y húmedo, de esos que se quedan colgando y al final no saben si mejor se quedan otro rato.
No sé qué ves tú.
De inmediato me envías unos cinco mínimo, gallinas, ranas y flores. Para ti es más la broma, pero también la respuesta. Eres veloz. Estás ahí y me contestas.
Y acabo de leer las cartas que Frida le mandaba a Diego. En hojas de papel, escritas con pluma fuente, con tinta que cambia de color porque se acababa el cartucho. (Alguna vez también así escribí yo, no porque así se acostumbrara, sino porque me da por ser anacrónica.)
Y lo que Frida se atrevía a escribir sin emoticonos previamente diseñados por alguien que quiere ahorrarle tiempo a los escribientes y comunicadores acelerados de hoy en día requería más valor que el que yo tuve que juntar para presionar y enviar una boquita roja y semi-abierta con la que quiero decirte lo mucho que extraño tu lengua arquearse dentro de mi boca.
Y me da envidia la naturalidad con la que Frida le escribe sin tapujos y con las metáforas más lindas y explosivas lo que Diego la hace sentir cada noche en cada encuentro. Yo quisiera volver a tener el valor de ser así de intensa. Quisiera decirte lo que cada noche me haces sentir, aunque no cada noche me toques tú directamente.
Pero no pinto, no estoy rota. Estoy entera, medio ciega, escribo en teclados, en celulares.
Y tú no eres Diego, no pintas. Diseñas con tu máquina, juegas con la intensidad de los colores en Photo Shop y en In Design.
Ya los amantes no creen en el amor ni en la pasión.

No comments:

Post a Comment

Followers

About Me

My photo
Palabras que fluyen, huyen y en algún lado tienen que acabar.